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Desayunos Dulces Fácil

Crumble de manzanas y muesli

Hoy una mega receta de lo que debe ser uno de los postres más fáciles y ricos del universo. El crumble de manzanas. Un crumble no es más que una compota de manzanas ( quien dice manzanas dice cualquier otra fruta… Podrían ser albaricoques, peras, frutos rojos, fresas en fin, lo pilláis) con un crumble o una especie de masa crujiente por encima. El crumble es de origen inglés dónde aparentemente también existe una versión salada en la que se cambia el azúcar por queso en la masa y en lugar de frutas se pone carne picada y cositas, no lo he probado, pero suena bien. El dulce puede ser de cualquier tipo de fruta que se preste y la masa clásica es de manteca, azúcar y harina. La versión más americanizada es con mantequilla y en lugar de harina también se pueden incluir otros cereales, granos o nueces.

Aparentemente surge en la vida de los ingleses allí por la II guerra mundial ya que había racionamiento y escasez de alimentos y era una buena manera de ahorrar masa. Sea como sea y con su historia de por medio tenemos un postre delicioso que no puede ser más fácil y que a mi me vuelve loca. Yo lo suelo hacer a ojo pero os dejaré las cantidades que uso y una receta con quinua que se hace mucho en Perú, la hice hace años en el blog y la tenéis aquí.

Ingredientes

  • 5 manzanas reineta
  • 3/4 taza de mantequilla
  • 1/2 taza de pasas
  • 1 taza de harina puede ser integral, blanca o trigo sarraceno por ejemplo
  • 1 taza de muesli variado (este tenía trocitos de frutas y crujientes)
  • una pizca de canela en polvo
  • una pizca de sal
  • nuez moscada
  • 1/2 taza azúcar de caña
  • 2 clavos de olor
  • 1 cucharadita de vainilla
  • pisco o una alcohol blanco, orujo, ron

Esto es bastante fácil. Lo primero es lavar bien y cortar las manzanas en dados. Yo no las pelo, me gusta la piel y no veo la necesidad de quitarme la fibra pero las podéis pelar si preferís.  Con las manzanas ya cortadas ponemos un dadito de mantequilla en una cacerola y las salteamos un poco a fuego medio. Bajamos el fuego y añadimos un chorrito de pisco, ron o lo que tengamos, añadimos una media taza de azúcar ( si luego nos falta más lo añadimos, pero de momento media). Una pizca de canela y otra de sal. Una cucharadita de esencia de vainilla, una pizca de nuez moscada y los clavos. Añadimos una media taza de agua y las pasas. Vamos a dejarlo hacer, queremos una compota. Lo removemos de rato en rato y cuando esté con textura de compota ( no tarda mucho) verificamos si está bien de azúcar, si nos gusta más dulce añadimos un poquito más y lo reservamos.

Mientras hacemos el crumble, necesitamos la mantequilla a temperatura ambiente. Mezclamos la mantequilla con la harina y el muesli. hasta hacer una especie de migas.

En una fuente de horno colocamos la compota de manzanas y por encima la tapamos con el crumble. Esto Dependerá del tamaño de vuestra fuente, la mía no era demasiado grande pero tenía un buen alto,  así que había un buen ancho de manzanas y una buena capa de crumble. Si os falta masa, haced un poco más. Mejor una fuente un poco más alta  y no tan larga, no es un pie.

Ponemos el horno a 170ºc y lo metemos al horno unos 45-50 minutos hasta que se dore un poco la masa. Listo, eso es todo y sabe a gloria, si a esto le ponéis una bola de helado de vainilla o un chorrito de crema ya os digo que vais a hacer crumble cada dos días, que disfrutéis!

Por cierto, es un desayuno perfecto!