Mi abuela lo tenía claro. Todas las mañanas les daba a sus seis (sí, 6) hijos este zumo. También los hacía desayunar avena, traían leche fresca de un establo y les daba 1 huevo al día. Lo tenía muy claro. A veces me pregunto en que momento se perdió esa información tan valiosa y por que mi generación se ha criado comiendo Frosties de Kellogs y leche de brick desnatada. Es triste. Me imagino la de niños que no han probado la leche de verdad nunca ni un plato de avena cocida con miel en su vida. Pero bueno a lo que voy, este es mi zumo favorito. Por suerte para mi también me lo daban de pequeña y es una ensalada en vaso. Maravilloso y esta buenísimo. A parte del zumo dejo una dibureceta… un sándwich facilito, para acompañar.
Ingredientes para un vaso
- 2 zanahorias pequeñas o una grande
- 1 tomate
- 1 naranja
Yo lo hago con un extractor de zumos, donde meto la zanahoria y el tomate y luego lo mezclo con el zumo de naranja. En casa se ha hecho siempre en licuadora de vaso pero luego hay que colarlo, esto ya depende de cada uno y de los cacharros que tenga.
Aquí la dibureceta: un sándwich de pollo y durazno (melocotón) esta de muerte.