Ya se han acabado las fiestas, estamos todos de vuelta y si como yo acabas de llegar de viaje igual en casa no hay nada de nada (alguna triste zanahoria en el fondo de la nevera, junto a la masa madre que te va a denunciar por abandono). Este es uno de mis salvavidas para estas ocasiones, es otra versión del mítico pan de soda que ya publiqué anteriormente aquí y que es un verdadero triunfo para cuando no tenemos pan ni nada que se le parezca. En este caso en lugar de las semillas y frutos secos que añadí en la versión anterior, lo que le puse fueron unos tomates secos y un poco de orégano. Otra versión, igual de rico!
Este pan os augura unos desayunos de lujo por muy poquito esfuerzo, con mermelada es la bomba. La receta la tenéis en el link pero os la vuelvo a poner. También la tenéis en el libro de Ibán Yarza, Pan casero.
Que lo disfrutéis.
Ingredientes
- 245g de harina integral de trigo
- 105g de harina panadera
- 3 cucharadas de postre de levadura química
- 300ml de agua
- 35g de miel
- 7 g de sal (como una cucharadita rasa de postre)
A esto yo le añadí
- Unos tomates deshidratados e hidratados en agua un par de horas (unos 7 u 8)
- pizca de orégano
Pues esto va así. Cogemos el molde tipo loaf o de pan de molde de unos 20cm. Lo engrasamos y enharinamos tal cual haríamos para un bizcocho. Ponemos el horno a 200ºC. Picamos el tomate en trocitos.Cogemos un bowl grande y mezclamos todos los ingredientes. Quedará como un puré. Le añadimos el tomate y el orégano. Lo echamos al molde, le espolvoreamos una capita de harina por encima y unos 45-50 minutos después estará listo.
Esperamos que enfríe, desmoldamos y dejamos enfriar bien. Luego os lo desayunáis con queso crema y seréis más felices que perdices!
