Hoy una receta de dos acompañamientos perfectos para una hamburguesa de lujo en casa. El domingo nos hicimos de unas buenas hamburguesas de carne de vaca madurada, un pan mollete, teníamos un poco de queso cheddar, unos pepinillos alemanes encurtidos con miel y con eso montamos unas hamburguesas de lujo caseras. Pero no os voy a hablar hoy de las hamburguesas sino de los acompañamientos. Para animar la fiesta hamburguesera preparé dos cosas muy fáciles, muy clásicas y bastante rápidas de hacer.
Por un lado la clásica coleslaw, pues obvio, mi acompañamiento favorito con una hamburguesa y por el otro lado unas papas doradas. Las papas doradas son una de las formas más sencillas y ricas de hacer las patatas (palabra de perucha), bastante menos grasas que en unas patatas fritas y personalmente a mi me chiflan hechas así. Os cuento las dos!
Ingredientes
Coleslaw
- 1/2 col
- 3 zanahorias
- mayonesa
- leche
- sal
- miel
- mostaza
La coleslaw es increíblemente fácil, lo único que hay que hacer es picar la col muy pequeñita, pelar y picar la zanahoria en trocitos muy pequeños también. Poner todo esto en un cuenco y añadirle unas 3 cucharadas de mayonesa (puede ser casera o comprada), una pizca de sal, una cucharadita de mostaza y una de miel. Mezclamos todo bien. Añadir un chorrito de leche para hacerla más líquida, mezclar muy bien todo hasta que esté homogéneo.
Hacerla con tiempo, mientras más tiempo se macere la col en la salsa más buena estará así que hacerla una hora ante al menos y dejarla reposar.
Papas doradas
- 2 patatas grandes
- sal
- aceite o mantequilla
Poner a cocer las patatas con piel (siempre). Una vez cocidas, pelarlas y cortarlas en rodajas. Calentar un poco de aceite o mantequilla ( con mantequilla son un espectáculo) en la sartén. Dorar las patatas por ambos lados hasta que queden crujientes por fuera. Poner en un papel para desgrasar un poco. El resultado será una patata crujiente por fuera y blandita por dentro, ponerles un poco de sal y listo.
Las hamburguesas os las dejo a vosotros.