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Fácil Vegetarianos

Frijoles con calabacín


Seguimos con platos veraniegos. A mi como que en verano se me da por comer casi sólo verduras, si seguís el blog lo habréis notado. Entre el calor, mis ganas de verde y para rematar un par de documentales traumáticos que me he visto ultimamente (Habéis visto Cowspiracy y What the health?) Ando más pegada a las verduras que a nada en la vida, no he decidido volverme vegana, ni vegetariana, pero si es verdad que mi consumo animal anda bastante reducido y espero reducirlo aun más.

Pero claro, hay que comer proteínas y las legumbres entre otras cosas tienen mucho de todo así que estoy intentando comer más legumbres en todas las formas que se me ocurra que no sean meterme un cocido a 40ºc.

Esta es sólo otra versión, esta vez que frijoles, que los echo mucho de menos. Los compré de bote y ya cocidos que yo ando muy vaga, pero podéis cocerlos vosotros si os apetece. Lo demás está tirado y lo acompaño con un poco de plátano maduro frito, que es mi otra obsesión veraniega.

Os lo cuento!


Ingredientes

  • 1 bote de frijoles negros cocidos o si vais a cocerlos vosotros, calculo que una taza aprox
  • 1 diente de ajo
  • 1 cebolla blanca
  • 1 calabacín
  • perejil
  • sal
  • pimienta
  • queso fresco latino o algún queso fresco denso y menos líquido
  • pimiento verde
  • aceite de oliva

Lavar bien los frijoles (del liquido en el que vienen), picar el ajo lo más pequeño posible, picar la cebolla, el pimiento y el calabacín en rodajas, picar un poco el perejil. Picar el queso en trozos.

Añadir un poquito de aceite en una sartén y sofreír la cebolla y el ajo, añadir el pimiento y el calabacín, saltear un poco, añadir sal y pimienta, añadir los frijoles, saltear bien y por ultimo el queso, dejar sólo un momento y retirar del fuego. La idea es saltear todo sólo un poco pero dejarlo bastante al dente, no hay que hacer demasiado la cebolla ni el calabacín para que se mantengan un poco crujientes. Luego añadirle un poco de perejil por encima y ya.

Servir con plátanos maduros fritos, vuelta y vuelta en un poquito de aceite y listo!

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Setas recolectadas y salteadas

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El fin de semana fui a coger setas por primera vez. Con un libro, un cuchillo, mi suegro que por suerte sabía lo que hacía como para no envenenarnos y un par de cestas nos lanzamos a la sierra de Madrid. Saltamos unas vallas y acabamos en una explanada cuchillo en mano buscando setas de cardo. Previa explicación de cómo es una seta de cardo, nos tiramos unas horas de caminata en busca del tesoro. Fuimos tarde, somos vagos y ya se habían llevado la mayoría, pero conseguimos unas cuantas. De cardo pocas, lo suficiente para este plato, eso sí muchos champiñones silvestres. Un día estupendo, cansados, pero con un botín, nos volvimos a casa a prepararlas y he aquí el resultado. Me ha gustado esto de la recolección, igual la próxima vez me levanto temprano y todo. Mientras os dejo la receta preparada a cuatro manos entre mi suegro y yo.

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Ingredientes

  • Un montón de setas de cardo
  • 3 Dientes de ajo
  • 2 guindillas
  • Aceite de oliva
  • Sal
  • Pimienta
  • Vino blanco
  • Jamón
  • Lo primero que necesitamos es las setas, si no os emociona lo de ir a buscarlas, que lo recomiendo encarecidamente, recolectarlas en el mercado. Si son silvestres hay que limpiarlas bien con un paño húmedo intentando no destrozarlas ya que son muy frágiles y con cuidado de quitar cualquier trocito de tierra que puedan tener.

    Calentar un poco de aceite a fuego alto en una sartén grande, pelar y picar los ajos, sofreír. Lanzar las setas troceadas, saltearlas bien dejando que se doren, para que no se queden blandas y cocidas hay que hacerlas bien y dejar que eliminen todo el líquido. Cuando estén ya “secas” y doraditas añadir el jamón picado, un par de guindillas, un chorrito de vino blanco, sal, pimienta. Saltear un poco más y servir.

    Un placer de principio a fin.

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